LAGUNA DE NEGRILLOS
Santa Cruz, una 'condición' transformada en tradición
Laguna de Negrillos celebra mañana sábado la fiesta de Santa Cruz, cuenta la historia popular que la celebración se remonta siglos atrás cuando una terrateniente dejó sus propiedades al pueblo con la condición de festejar Santa Cruz cada año.
En la actualidad, los festejos se realizan en un edificio de nueva construcción (año 1986) ya que la anterior estructura se perdió totalmente con el tiempo. El templo se ubica en el monte que divide los terrenos de Algadefe y Laguna de Negrillos –el de Santa Marinicia-, hasta allí se trasladan por Santa Cruz vecinos de ambos municipios para disfrutar de la jornada campestre.
Con el tiempo, la festividad se trasladó al sábado siguiente del tres de mayo para facilitar la asistencia de los visitantes.
El programa festivo de la jornada comienza pronto. A las 10:00 horas sale la procesión de la Santa desde la iglesia parroquial de San Juan Bautista de Laguna de Negrillos hasta el puente del arroyo. Desde allí es traslada en coche a su ermita de la Santa Cruz que dista del pueblo a unos dos kilómetros y medio. Alrededor de las 13:00 horas da comienzo la romería y al finalizar el Ayuntamiento de Laguna de Negrillos ofrece aperitivos y vino español a los asistentes. La jornada se prolonga hasta el anochecer, alrededor de las 21:00 horas, se realiza la bendición de los campos y la imagen regresa a la parroquia.
La historia de una condición fronteriza
Los vecinos de Algadafe y de Laguna de Negrillos cuentan que es ‘sabido’, desde tiempo inmemorial, que una señora terrateniente natural de Laguna de Negrillos era dueña del monte y de los prados donde está situada la ermita. A su muerte, hace más de cuatro siglos, cedió estos enormes terrenos al Ayuntamiento de Laguna con una única condición: celebrar una misa en la ermita cada 3 de Mayo. La condición interpuesta tenía una sanción: si esta celebración no se llevara a cabo los terrenos pasarían a pertenecer al Ayuntamiento de Algadefe, ya que el esposo de la terrateniente era natural de dicha localidad.
La tradición ha sido trasladada generación tras generación por el saber popular y no existe ningún documento oficial que confirme los hechos. Una bonita historia que combina trazos de realidad con retazos de leyenda, una condición que en Laguna de Negrillos siempre cumplen con mucho sentimiento y conocimiento de la misma.
