Alfombra de tomillo, petalos de flores y mucho calor por el Corpus coyantino

Valencia de Don Juan volvió a ofrecer ayer una de sus estampas más hermosas con la celebración del Copus. Los niños que han realizado la Comunión fueron los protagonistas de la tradicional procesión del Copus. Una alfombra de tomillo engalanó las calles de la localidad que fueron recorridas por la procesión, abriendo la misma el pendón de la localidad, el Grupo de Danzas Coyanza, la Banda de Música de Valencia de Don Juan y autoridades acompañaron al Santísimo bajo palio. Las calles de la localidad también fueron engalanadas en balcones y ventanas para este día, en el que además se realizaron ofrendas en varios altares ubicados en el recorrido.

Entre los momentos más emotivos la presentación de los coyantinos más pequeños que fueron presentados en los altares según manda la tradición. La lluvia de petalos de flores realizada por los niños en los altares y al Santísimo volvió a ser uno de los momentos más esperados. Al empezar la procesión y al finalizar el Grupo de Danzas Coyanza danzó el tradicional paloteo.

El calor abrasador de la jornada dejó estampas curiosas, numerosos abanicos entre las niñas de Comunión y alguna madre previsora que pulverizó agua sobre los pequeños para  para aliviar las altas temperaturas.