Cultura
Gordoncillo, ejemplo de cómo utilizar el patrimonio como recurso turístico cultural
El director del Mihacale imparte mañana una conferencia en la Universidad de León dentro del ciclo 'Patrimonios emergentes: viejas fábricas y paisaje rural'.
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Gordoncillo será ejemplo de una de las conferencias del ciclo 'Patrimonios emergentes: viejas fábricas y paisaje rural' organizado por el grupo de investigación Invester y el departamento de Geografía de la Universidad de León y coordinado por Paz Benito del Pozo. El director del Museo de la Industria Harinera de Castilla y León (Mihacale), Javier Revilla, será el encargado de impartir mañana jueves esta ponencia titulada 'Las industrias agroalimentarias como recurso turístico cultural: el caso de Gordoncillo. Será a las 17:00 horas en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de León.
En la misma se abordará la realidad actual de un municipio leonés, Gordoncillo, que desde hace años viene apostando decididamente por el fomento de la cultura, el patrimonio y el turismo como elementos enriquecedores y dinamizadores, además de entenderlos como imprescindibles factores de desarrollo local.
En la conferencia se tratará de mostrar una realidad lograda -no sin mucho esfuerzo- por parte de una pequeña localidad leonesa que en los últimos años ha decido no resignarse a la aparente erradicación de nuestro mundo rural, consiguiendo demostrar que existen posibilidades de supervivencia. Apostar por la calidad, por el patrimonio natural y artístico (destacando en este sentido la puesta en valor del paisaje y de elementos industriales como bodegas y la fábrica de harinas), así como sustentar los proyectos en la herencia cultural de nuestro territorio, se nos antojan como aspectos claves
Una tierra ligada a la vid
Gordoncillo se encuadra en uno de los límites de la comarca natural Tierra de Campos y en la ribera del río Cea. Este factor geográfico ha condicionado el pasado y el presente de sus habitantes, dedicados fundamentalmente a la agricultura y a la ganadería. El cruce del Cordel de la Zamorana (importante vía para la trashumancia de ovejas) y del Camino Real Toro-Avilés, hicieron que la localidad de Gordoncillo adquiriera una notable preponderancia económica en siglos pasados; posteriormente, el distanciamiento respecto a los ejes principales de comunicación fue relegando a la zona a una posición menos favorable. Esencialmente, Gordoncillo ha asentado siempre su economía en la agricultura, con dos pilares básicos: los cultivos del cereal y de la vid.
El viñedo ha sido seña de identidad histórica de Gordoncillo, lo cual se manifiesta en una evidencia arquitectónica: prácticamente todas las casas de la población poseen bodegas subterráneas y a mayores se horadó el cerro de 'La Vita' para construir bodegas-cueva donde fermentar y conservar los vinos. La concentración en el año 1995 de la práctica totalidad de los propietarios de viñedo en la localidad, creándose la empresa bodeguera Gordonzello SA, supuso la recuperación de un sector económico vital para esta población; la unión inicial de 101 socios que aportaron más de 300 hectáreas de viñedo supusieron la posterior plantación de 205 nuevas hectáreas modernas (en su mayor parte de la variedad autóctona Prieto Picudo) y la construcción de una puntera bodega en el año 2002.
Actualmente, Gordonzello SA no sólo elabora algunos de los mejores vinos de la Denominación de Origen Tierra de León, sino que desarrolla la oferta enoturística más importante de la comarca: se pueden visitar las modernas instalaciones, conociendo el proceso de elaboración y crianza del vino, pero también hay rutas por el viñedo (de 7 y 10 Km), el Museo de las Variedades con una plantación de 101 cepas de variedades de todo el mundo y un "centro de interpretación del vino" emplazado en una antigua bodega tradicional recuperada con fines didácticos.
A dicha realidad, desde agosto de 2014 el Ayuntamiento de Gordoncillo ha sumado el Museo de la Industria Harinera de Castilla y León (Mihacale), reforzando así la oferta turístico-cultural de la localidad. El Mihacale se ubica en la antigua Fábrica de Harinas Marina Luz, una industria agroalimentaria activa entre 1936 y 1965 donde se transformaba el producto de otro de los cultivos tradicionales de la zona, el trigo. La fábrica se ha restaurado completamente, salvándose de una inminente ruina, y actualmente muestra su maquinaria tal cual fue concebida, para explicar al visitante el interesante proceso industrial que realizaba, incidiendo además en aspectos laborales y sociales de aquella época. Junto a ella se ha habilitado otro gran espacio expositivo donde se muestra una colección de máquinas relacionadas con el sector, algunas de ellas centenarias, y también vinculadas al cultivo cerealista, su recolección y limpieza en las eras, contando el museo con un equipo de restauración y puesta en valor de este patrimonio material. Por último, las instalaciones del museo han rehabilitado las dos plantas de la antigua panera de tapial y adobe como auditorio y sala de exposiciones, amplios espacios que albergan a lo largo del año distintos eventos culturales y artísticos que han dinamizado la ya de por sí fecunda actividad cultural de Gordoncillo.
Javier Revilla
Javier Revilla Casado (Valencia de Don Juan, 1981): Licenciado en Historia (Universidad de Valladolid, 2006) y Doctor en Historia (Universidad de León, 2016), es especialista en historia contemporánea y patrimonio industrial, habiendo publicado más de una veintena de publicaciones al respecto. Desde sus inicios es el responsable del Museo de la Industria Harinera de Castilla y León (Mihacale), dependiente del Ayuntamiento de Gordoncillo (León), donde trabaja en la actualidad.
Gordoncillo será ejemplo de una de las conferencias del ciclo 'Patrimonios emergentes: viejas fábricas y paisaje rural' organizado por el grupo de investigación Invester y el departamento de Geografía de la Universidad de León y coordinado por Paz Benito del Pozo. El director del Museo de la Industria Harinera de Castilla y León (Mihacale), Javier Revilla, será el encargado de impartir mañana jueves esta ponencia titulada 'Las industrias agroalimentarias como recurso turístico cultural: el caso de Gordoncillo. Será a las 17:00 horas en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de León.
En la misma se abordará la realidad actual de un municipio leonés, Gordoncillo, que desde hace años viene apostando decididamente por el fomento de la cultura, el patrimonio y el turismo como elementos enriquecedores y dinamizadores, además de entenderlos como imprescindibles factores de desarrollo local.
En la conferencia se tratará de mostrar una realidad lograda -no sin mucho esfuerzo- por parte de una pequeña localidad leonesa que en los últimos años ha decido no resignarse a la aparente erradicación de nuestro mundo rural, consiguiendo demostrar que existen posibilidades de supervivencia. Apostar por la calidad, por el patrimonio natural y artístico (destacando en este sentido la puesta en valor del paisaje y de elementos industriales como bodegas y la fábrica de harinas), así como sustentar los proyectos en la herencia cultural de nuestro territorio, se nos antojan como aspectos claves
Una tierra ligada a la vid
Gordoncillo se encuadra en uno de los límites de la comarca natural Tierra de Campos y en la ribera del río Cea. Este factor geográfico ha condicionado el pasado y el presente de sus habitantes, dedicados fundamentalmente a la agricultura y a la ganadería. El cruce del Cordel de la Zamorana (importante vía para la trashumancia de ovejas) y del Camino Real Toro-Avilés, hicieron que la localidad de Gordoncillo adquiriera una notable preponderancia económica en siglos pasados; posteriormente, el distanciamiento respecto a los ejes principales de comunicación fue relegando a la zona a una posición menos favorable. Esencialmente, Gordoncillo ha asentado siempre su economía en la agricultura, con dos pilares básicos: los cultivos del cereal y de la vid.
El viñedo ha sido seña de identidad histórica de Gordoncillo, lo cual se manifiesta en una evidencia arquitectónica: prácticamente todas las casas de la población poseen bodegas subterráneas y a mayores se horadó el cerro de 'La Vita' para construir bodegas-cueva donde fermentar y conservar los vinos. La concentración en el año 1995 de la práctica totalidad de los propietarios de viñedo en la localidad, creándose la empresa bodeguera Gordonzello SA, supuso la recuperación de un sector económico vital para esta población; la unión inicial de 101 socios que aportaron más de 300 hectáreas de viñedo supusieron la posterior plantación de 205 nuevas hectáreas modernas (en su mayor parte de la variedad autóctona Prieto Picudo) y la construcción de una puntera bodega en el año 2002.
Actualmente, Gordonzello SA no sólo elabora algunos de los mejores vinos de la Denominación de Origen Tierra de León, sino que desarrolla la oferta enoturística más importante de la comarca: se pueden visitar las modernas instalaciones, conociendo el proceso de elaboración y crianza del vino, pero también hay rutas por el viñedo (de 7 y 10 Km), el Museo de las Variedades con una plantación de 101 cepas de variedades de todo el mundo y un "centro de interpretación del vino" emplazado en una antigua bodega tradicional recuperada con fines didácticos.
A dicha realidad, desde agosto de 2014 el Ayuntamiento de Gordoncillo ha sumado el Museo de la Industria Harinera de Castilla y León (Mihacale), reforzando así la oferta turístico-cultural de la localidad. El Mihacale se ubica en la antigua Fábrica de Harinas Marina Luz, una industria agroalimentaria activa entre 1936 y 1965 donde se transformaba el producto de otro de los cultivos tradicionales de la zona, el trigo. La fábrica se ha restaurado completamente, salvándose de una inminente ruina, y actualmente muestra su maquinaria tal cual fue concebida, para explicar al visitante el interesante proceso industrial que realizaba, incidiendo además en aspectos laborales y sociales de aquella época. Junto a ella se ha habilitado otro gran espacio expositivo donde se muestra una colección de máquinas relacionadas con el sector, algunas de ellas centenarias, y también vinculadas al cultivo cerealista, su recolección y limpieza en las eras, contando el museo con un equipo de restauración y puesta en valor de este patrimonio material. Por último, las instalaciones del museo han rehabilitado las dos plantas de la antigua panera de tapial y adobe como auditorio y sala de exposiciones, amplios espacios que albergan a lo largo del año distintos eventos culturales y artísticos que han dinamizado la ya de por sí fecunda actividad cultural de Gordoncillo.
Javier Revilla
Javier Revilla Casado (Valencia de Don Juan, 1981): Licenciado en Historia (Universidad de Valladolid, 2006) y Doctor en Historia (Universidad de León, 2016), es especialista en historia contemporánea y patrimonio industrial, habiendo publicado más de una veintena de publicaciones al respecto. Desde sus inicios es el responsable del Museo de la Industria Harinera de Castilla y León (Mihacale), dependiente del Ayuntamiento de Gordoncillo (León), donde trabaja en la actualidad.
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