de pueblo en pueblo - capítulo 3
Tierra fértil que emerge en el Páramo, Grajal de Ribera
![[Img #18400]](upload/img/periodico/img_18400.jpg)
Grajal de Ribera es uno de esos escasos pueblos que emerge frondoso en el Páramo, como si de un oasis se tratara. Grajal está ubicado en un altozano -posiblemente en su origen con fines defensivos- repleto de cuevas (bodegas) y coronado por una iglesia de contundente torre. Está ubicado en el antiguo Camino Real que unía Valderas con La Bañeza y que pudiera tener parte de origen romano. Hay documentos históricos que reflejan la existencia de Grajal ya en el siglo IX, por aquel entonces se llamaba San Pelayo de Pobladura (topónimo que conservó hasta el siglo XII)
Una cerrada curva en la carretera (LE-412) obliga a admirar con más detenimiento este pequeño pueblo que atesora historias de grandes batallas y un pasado glorioso en el que la "villa" (ostentaba tal título) contó con fortaleza propia. Nada queda ya de aquel castillo por el que pasaron nobles y vasallos, tan sólo la creencia popular que afirma que la iglesia -dedicada a la advocación de Santa Eulalia- está edificada sobre las ruinas de la antigua fortaleza. Algunos se atreven a aventurar que "ciertas piedras" de la parte más baja de la capilla de San Antonio (la más antigua) y de la torre son piedras romanas. Así se funden historia y leyenda en una localidad que mantiene intacto su origen agrícola, favorecido por la fértil vega del riachuelo que la riega.
El saber popular cuenta generación tras generación parte de la historia local. Así, con la frase 'la torre de Grajal tiene mucho pico' se tacha a aquellos que hablan y "cacarean" más de la cuenta. También hay respuesta popular para tal sentencia que se responde con: "y el que habla más". Este dicho tiene historia y es que la frase tiene su origen en relación a la gran altura de la torre de la actual iglesia, la original llegó a medir 11 metros más que la actual y estaba rematada en forma piramidal. Su altura era tal que era avistada desde varios kilómetros, incluso desde Roperuelos era vista. En 1914, la torre fue mutilada en consecuencia a su deteriorado estado y así perdió 11 metros de altura. Ese mismo año se construyó la carretera que pasa por Grajal y une Valderas con La Bañeza-.
La iglesia de Santa Eulalia actualmente es el único templo de la localidad. Es una edificación del siglo XV, de portada y armadura mudejar, alberga en su interior un hermoso retablo barroco y un interesante artesonado. Además, cuenta con varias tallas flamencas y piezas de diverso interés. Los vecinos aún recuerdan una hermosa talla de gran valor de La Piedad, "tan pesada que tuvo que ser cortada para ser procesionada en El Corpus" cuentan, y que fue robada hace unos años.
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Y mientras el sol se pone, los vecinos -amables y hospitalarios- cuentan leyendas e historias del pueblo. Reciben al forastero com hospitalidad y una sonrisa, mientras cuentan (y aseguran) que en una de las bodegas que mira a la iglesia nacía un túnel que comunicaba con el castillo de Laguna de Negrillos -localidad ubicada a unos 10 kilómetros-.
Al abandonar Grajal por la carretera... inevitablemente la mirada se mantiene fija en el retrovisor hasta que la torre se pierde en el horizonte.
Fuentes:
- Tradicional oral
- Manual de la historia y del patrimonio de León y provincia. Maximiano Pastrana Santos
- El Páramo Leonés. Francisco Rodríguez Juan.
Esta sección está patrocinada por El Baúl de Pili
Grajal de Ribera es uno de esos escasos pueblos que emerge frondoso en el Páramo, como si de un oasis se tratara. Grajal está ubicado en un altozano -posiblemente en su origen con fines defensivos- repleto de cuevas (bodegas) y coronado por una iglesia de contundente torre. Está ubicado en el antiguo Camino Real que unía Valderas con La Bañeza y que pudiera tener parte de origen romano. Hay documentos históricos que reflejan la existencia de Grajal ya en el siglo IX, por aquel entonces se llamaba San Pelayo de Pobladura (topónimo que conservó hasta el siglo XII)
Una cerrada curva en la carretera (LE-412) obliga a admirar con más detenimiento este pequeño pueblo que atesora historias de grandes batallas y un pasado glorioso en el que la "villa" (ostentaba tal título) contó con fortaleza propia. Nada queda ya de aquel castillo por el que pasaron nobles y vasallos, tan sólo la creencia popular que afirma que la iglesia -dedicada a la advocación de Santa Eulalia- está edificada sobre las ruinas de la antigua fortaleza. Algunos se atreven a aventurar que "ciertas piedras" de la parte más baja de la capilla de San Antonio (la más antigua) y de la torre son piedras romanas. Así se funden historia y leyenda en una localidad que mantiene intacto su origen agrícola, favorecido por la fértil vega del riachuelo que la riega.
El saber popular cuenta generación tras generación parte de la historia local. Así, con la frase 'la torre de Grajal tiene mucho pico' se tacha a aquellos que hablan y "cacarean" más de la cuenta. También hay respuesta popular para tal sentencia que se responde con: "y el que habla más". Este dicho tiene historia y es que la frase tiene su origen en relación a la gran altura de la torre de la actual iglesia, la original llegó a medir 11 metros más que la actual y estaba rematada en forma piramidal. Su altura era tal que era avistada desde varios kilómetros, incluso desde Roperuelos era vista. En 1914, la torre fue mutilada en consecuencia a su deteriorado estado y así perdió 11 metros de altura. Ese mismo año se construyó la carretera que pasa por Grajal y une Valderas con La Bañeza-.
La iglesia de Santa Eulalia actualmente es el único templo de la localidad. Es una edificación del siglo XV, de portada y armadura mudejar, alberga en su interior un hermoso retablo barroco y un interesante artesonado. Además, cuenta con varias tallas flamencas y piezas de diverso interés. Los vecinos aún recuerdan una hermosa talla de gran valor de La Piedad, "tan pesada que tuvo que ser cortada para ser procesionada en El Corpus" cuentan, y que fue robada hace unos años.
Y mientras el sol se pone, los vecinos -amables y hospitalarios- cuentan leyendas e historias del pueblo. Reciben al forastero com hospitalidad y una sonrisa, mientras cuentan (y aseguran) que en una de las bodegas que mira a la iglesia nacía un túnel que comunicaba con el castillo de Laguna de Negrillos -localidad ubicada a unos 10 kilómetros-.
Al abandonar Grajal por la carretera... inevitablemente la mirada se mantiene fija en el retrovisor hasta que la torre se pierde en el horizonte.
Fuentes:
- Tradicional oral
- Manual de la historia y del patrimonio de León y provincia. Maximiano Pastrana Santos
- El Páramo Leonés. Francisco Rodríguez Juan.
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Genuino Madrid Pisabarro | Martes, 20 de Octubre de 2015 a las 18:15:45 horas
Me parece que algunos datos de la crónica no coinciden con la realidad.
Por ejemplo, el túnel al que hace referencia no se quien habrá dicho que comunicaba con el Castillo de Laguna, entre otras cosas porque dicho Castillo es muy posterior a las bodegas. Más cierto parece ser que el referido túnel, que supuestamente salía de la bodega del señor Juan, pasaba por debajo del canal y la casa de Gaspar para terminar supuestamente bajo la pila bautismal. De seguro llegaba al canal, luego los derrumbes y la falta de oxígeno impidieron seguir a quienes trataron de explorar el túnel referido.
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