Fresno de la Vega, destino de ‘nómadas digitales’ de Ineco Rural TIC

Durante dos semanas Fresno de la Vega ha contado con dos habitantes más. Cristina Jiménez y Gonzalo Vinssac, ambos trabajadores de Ineco, se han convertido en dos fresneros más durante unos días. Ellos han desarrollado su actividad desde la localidad de la Vega del Esla. El objetivo de esta novedosa iniciativa impulsada por Ineco es ‘conectar’ con el medio rural al tiempo que se pretende ‘digitalizar’ los pueblos a través de acciones formativas. Cristina y Gonzalo son los dos primeros ‘nómadas digitales’ que llegan a la localidad de la mano de Ineco Rural TIC.

El proyecto Rural TIC es un programa pionero que busca la digitalización del mundo rural desarrollado por Ineco, la ingeniería y consultoría del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, referente en movilidad sostenible y transformación digital. Los nómadas digitales teletrabajan en sus destinos e imparten talleres y actividades formativas en el uso de nuevas tecnologías a los habitantes de los pueblos. La idea es acabar con la brecha digital.

En el caso de Cristina y Gonzalo la experiencia ha sido además innovadora ya que se ha optado por impartir varias charlas y talleres en el colegio de la localidad para explicar a los menores el uso de las redes sociales y los riesgos que conlleva. Además se han desarrollado varias acciones formativas solicitadas por vecinos de la localidad.

La experiencia ha sido “muy gratificante”. “Es una forma diferente de vivir que cuenta con ventajas como la tranquilidad, disfrutar de la naturaleza y poder venir al trabajo” comenta Gonzalo. Este ingeniero de caminos subraya el hecho de tardar tan solo “dos minutos” de su alojamiento al lugar donde han teletrabajado dos semanas es todo un lujo. Una de las condiciones para los municipios para ‘entrar’ en este programa es facilitar el alojamiento a los nómadas digitales además de ofrecer un espacio de trabajo. El Ayuntamiento de Fresno de la Vega ha logrado ‘entrar’ en este programa de digitalización y para ello ha puesto todas las facilidades a los trabajadores de Ineco. “Nos han tratado muy bien y nos han facilitado mucho las cosas” comenta Cristina que es arquitecta de Ineco.

En estas dos semanas, hoy es su último día, han teletrabajado en la zona de la biblioteca del pueblo conviviendo con los vecinos del pueblo. Como suele ocurrir en los pueblos no ha faltado el “yo a ti no te conozco” de alguno de los vecinos. “Es increíble la hospitalidad con la que nos hemos encontrado, aunque lo que más me ha sorprendido es el increíble paisaje del pueblo con sus acequias y huertas… ¡no me lo esperaba!” explica Cristina. Pero lo más sorprendente para estos nómadas digitales ha sido “¡las cuevas!” (las bodegas excavadas en la tierra).

Son urbanitas y aunque “tienen pueblo” (uno de Soria y otro de Toledo) siempre han vivido en la ciudad. Después de esta experiencia, Gonzalo no descarta trasladarse a un pueblo para teletrabajar temporadas y poder combinar las ventajas de ambos mundos, mientras Cristina explica que Ineco facilita el teletrabajo a sus trabajadores. “Si me viniera a vivir a un pueblo tendría que cambiar mi modo de vida, porque no tengo coche, creo que las administracions si se quieren revitalizar los pueblos hay que mejorar los medios de comunicación terrestres” apunta la arquitecta que también apunta que extrañaría la amplia oferta cultural que ofrece la capital.

Han sido dos semanas de experiencia y teletrabajo con un balance “muy positivo”. Dos semanas de teletrabajo desde un pequeño pueblo de la Vega del Esla. “Realmente solo necesitamos una buena conexión de internet y un ordenador para poder trabajar” reconocen mientras disfrutan del recuerdo de sus paseos después de trabajar en Fresno que se convierte así en el mejor destino para ‘nómadas digitales’.