UGAL-UPA logra que las Titularidades Compartidas de la provincia no vean paralizada su constitución por no disponer de certificado digital

La petición expresa de UGAL-UPA para resolver el problema detectado en la provincia sobre las Titularidades Compartidas (TC) y su registro para su puesta en marcha ha permitido que la Administración regional dé una respuesta inmediata.

La organización planteó días atrás a la Junta de Castilla y León las dificultades que los profesionales agrarios de la región estaban encontrando para tramitar la solicitud de inscripción de una Titularidad Compartida.

La Titularidad Compartida es una figura jurídica de la explotación agraria a la que pueden acogerse aquellas parejas que comparten el trabajo y gestión de la explotación. Esta figura permite que la administración, representación y responsabilidad de la explotación recaigan sobre ambas personas titulares, fomentando la igualdad entre ellas.

UGAL-UPA, a través de UPA CYL, expuso a la Consejería de Agricultura que, en lugar de promover la igualdad real y efectiva de las mujeres y parejas en el medio rural, la burocracia administrativa había estado dificultando la gestión de la misma.

El problema radicaba en que, para poder tramitar la solicitud de inscripción de una TC, era obligatorio disponer del CIP (Código Personal de Identificación), lo que requería que la titularidad estuviera previamente registrada en el registro de beneficiarios de la Junta de Castilla y León.

Esta gestión de obtención del CIP se realizaba hasta hace unos meses a través de las Secciones Agrarias Comarcales (SAC), que daban de alta la Titularidad Compartida en el Registro de Beneficiarios y asignaban un código para continuar con los trámites de alta.

Sin embargo, desde hace algunos meses, algunas SAC informaban a los titulares que debían solicitar el número CIP a ellos mismos mediante un certificado digital. La incongruencia de esta medida era que las TC no tienen certificado digital hasta que no están inscritas en el RETICOM (Registro de Explotaciones Agrarias de Titularidad Compartida del Ministerio de Agricultura), lo que imposibilitaba que pudieran realizar el registro o relacionarse con la Administración telemáticamente hasta estar constituidas.

Este inconveniente resultaba fácilmente resoluble, como se ha demostrado, con la simple directriz por parte de la Administración regional de que todas las SAC realizaran el trámite de forma presencial, tal y como lo venían haciendo anteriormente, asignando el código CIP básicamente a los demandantes para que pudieran realizar las gestiones pertinentes.

La actuación rápida de UGAL-UPA exigiendo una solución a este problema ha resuelto un grave inconveniente que estaba afectado a los titulares agrarios en el proceso de constitución de una TC, y, por lo tanto, en la gestión de derechos, cuotas, subvenciones y demás trámites necesarios para impulsar esta figura, cuyo objetivo principal es garantizar la igualdad real y efectiva de las mujeres en el sector agrario.