Villamañán rinde homenaje a su párroco por 50 años 'acompañando'

50 años de su vida ha dedicado Isaías Astorga a la parroquia de Villamañán. Este sábado recibió el cariño de los suyos, "su familia" en un sentido homenaje que rindió tributo a las cinco décadas del párroco en Villamañán. Un día de fiesta en el que las campanas tocaron a fiesta. Una cita que también contó con los emblemáticos danzantes que sacaron sus trajes de cintas y abullonadas faldas blancas salieron con sus danzas para buscar al párroco. Unos dazantes que precedieron la comitiva oficial presidida por el alcalde de Villamañán, Marcos Fernández, acompañado de corporación y autoridades. También estuvo presente el alcalde de Villaquejida, David González, localidad natal del párroco.

Don Isaías, un sacerdote cercano y con un gran talante, sonrió al ver la comitiva. Visiblemente emocionado, pero entero como solo los guías espirituales saben hacer, recibió con alegría a todos. Por supuesto no faltaron las bromas, y es que la simpatía de este hombre de Dios es conocida. Ya en la iglesia bromeó, "os habeís adelantado". 

El 24 de octubre de 1974 llegó a Villamañán desde el Seminario un sacerdote que, como él explico, destinado a estar en el Seminario. Él deseaba trasladarse a una parroquia y así se lo hizo saber a su obispo de aquel entonces. Cuando el obispo le "dio destino", él soñó con que fuera en la montaña "de donde tenía muy buenos recuerdos". El obispo le anunció muy contento "muy cerca de tu pueblo", eso sí le advirtió "la iglesia se cae". Así llegó hasta Villamañán donde encontró su familia.

Con humildad explicó que al encontrar una iglesia casi en ruinas tomó como ejemplo a Francisco de Asís y comenzó a trabajar en recuperar la iglesia. Un gran golpe que nunca olvidará llegó el 4 de octubre de 1984 cuando la torre de la iglesia se vino abajo. Pero con fé consiguió que aquel templo en ruinas se convirtiera en un gran templo que ha sido escenario de alegrías y,también, de muchas lágrimas.

"Estos 50 años os he acompañado" recordó el párroco quien admitió que las despedidas de los feligreses es lo que más "ha sufrido". "Son mis amigos" y "verdaderamente impacta porque hemos despedido a toda una generación".

El pueblo de Villamañán, la parroquia de Villamañán, agradeció con ofrendas y sumo cariño su presencia a esta párroco nacido en Villaquejida que hace medio siglo encontró su hogar en Villamañán. Tampoco faltó la representación de sus otras parroquias, y es que Don Isaías también es parroco de Villacé y Villacalbiel y de Benamariel.

El alcalde Marcos Fernández agradeció todo el trabajo y la dedicación del parroco y le entregó un pergamino enmarcado con el título de hijo adoptivo de Villamañan. El pueblo de Villamañán también regaló al párroco una casulla, alba y una Biblia.

"No me lo merezco, pero lo agradezco" reconoció con gran cariño Don Isaías durante el homenaje.

Hijo adoptivo 

Don Isaías Astorga fue nombrado hijo adoptivo de Villamañán en el transcurso de un pleno el pasado 30 de agosto. Toda la corporación aprobó de forma unánime la propuesta realizada desde el equipo de Gobierno. Un nombramiento que tiene como fin reconocer el cariño de todo un pueblo a la persona que durante 50 años ha estado al frente de la parroquia. Reconocimiento en un sentido homenaje que llega con título, ahora Don Isaías ya es "hijo" de Villamañán.