Una bodega con la solera al aire pone en riesgo esta calle

La pesadilla de los hundimientos de bodegas en Valderas parece no haber acabado. Tan solo un punto y seguido en un problema histórico que amenaza de manera continuada a la villa del Cea. En esta ocasión, la mirada se posa en la céntrica calle Alonso Castrillo, la que fuera calle Derecha (dada su relevancia). Aquí las casonas palaciegas y señoriales llenaron la calle. El subsuelo, como prácticamente todo el caso histórico valderense, hueco con bodegas centenarias.

Uno de los palacios que en esta calle se levantan, el de los Marqueses de Janillo, cuenta con una gran bodega que está literalmente con la calle en el "aire". Con parte del cielo derruido, el pavimento de la calle se ve a simple vista desde su interior. Lo que lo convierte en una trampa que puede ceder en cualquier momento.

Algunos vecinos de la calle denuncian el paso de grandes vehículos, ya que a pesar de que existe una señal que impide el paso de vehículos de alto tonelaje sí pueden pasar aquellos de servicios urbanos. Tales como los dedicados a la recogida de residuos, como son los de la mancomunidad. "Cualquier día un camión acaba en la bodega porque cede la calle" alertan los vecinos.

Lo cierto es que existe un informe que data de hace ya unos años que alerta del riesgo de derrumbe. En él incluso se recomienda que se evite el estacionamiento de vehículos en la acera del palacio para evitar que ceda la calle. Por este motivo, hace ya un tiempo se instalaron unos "pivotes" rojos para disuadir que aparcaran vehículos.

El daño es interno y lleva años acumulándose, pero hace alrededor de tres años una raja apareció en el asfalto, hay varias en la calle, pero esta preocupa. Poco a poco ha ido creciendo y ahora ya cuenta con "algo más de un dedo de grosor". Además, señalan que cuando llueve el agua filtra sin control por ella, lo que es un peligro para todas las construcciones del lugar.

Ya en 2019 se presentó un escrito en el Ayuntamiento de Valderas indicando el hundimiento de la acera del otro lado del Palacio de los Janillo. Desde entonces han sido varias reclamaciones, pero soluciones según indica el denunciante ninguna.

"Cualquier día la calle se cae y tendremos una desgracia" afirma uno de los vecinos quien señala que por esta calle han llegado a transitar vehículos de hasta 35 toneladas con el riesgo que conlleva.

Lo cierto es que el edificio es de titularidad privada, el mantenimiento de la bodega y del edificio es por tanto del propietario. Aquí el problema es que parte de la bodega se extiende por la calle.

En Valderas los derrumbes de bodegas es un malendémico. Aún sigue muy vivo el recuerdo de aquella noche de este marzo cuando se derrumbó parte de una de las bodegas de la Plaza Mayor que ha supuesto la sentencia para tres inmuebles de la histórica plaza. Una pérdida que aún no se ha materializado pero que, en breve, cambiará para siempre la fisonomía de la céntrica plaza.

El miedo de que esto pueda volver a ocurrir o que, incluso, el daño sea peor lleva a la denuncia pública del gran riesgo de la calle Alonso Castrillo.

Una zarcera con la solera de la calle en el aire.

La zarcera del Palacio de los Marqueses de Janillo a la calle Alonso Castrillo es un riesgo. No se sabe la dimensión del agujero dispuesto a hundirse  pero lo cierto es que la solera de la calle está al aire. La mala ventilación de la bodega y las continuas filtraciones son una amenaza constante que ponen en riesgo la calle.

El corazón de este histórico edificio está deteriorándose a pasos agigantados y parte de la gran bodega pone en riesgo a la calle.