El ondulante paisaje de Los Oteros tiene desde ayer un mirador único. La torre de Castilfalé, transformada en mirador, ofrece un espectáculo visual desde una atalaya localizada en un punto incomparable. Desde el Teleno, hasta el palentino Espiguete, el Polvoreda o el mítico Teleno. Todas esas cumbres se atisban desde esta torre recién restaurada y transformada en Mirador.

El Mirador de Los Oteros de la Torre de Castilfalé ha abierto este fin de semana sus puertas. Se trata de un proyecto que comenzó con la ilusión de que la torre "no se cayera". La actual alcaldesa en funciones, Purificación del Valle, que abandonará su puesto el próximo 17 de mayo tenía claro que evitar el derrumbe de la torre era esencial para conservar el patrimonio y la historia de la localidad. 

Así comenzó todo, con la ilusión de mantener viva esa magnífica torre que vigila Castilfalé. Para la realización del proyecto se realizó un informe histórico artístico que recoge que la localidad ya aparece documentada en 1034 dentro de los documentos de la Catedral de León como "Castrllo de Falei". La torre está asentada en un cerro, fuera del casco consolidado y en la zona más alta de la población, se cree que en algún momento el asentamiento de la población fue en este lugar y que posteriormente se trasladó. Algunos estudios apuntan que esta torre localiza una antiguo asentamiento prehistórico que hubiera podido estar amurallado.

En su día Castilfalé contó con gran revelancia, pero de aquella importancia histórica y de su patrinonio histórico poco queda por eso el afán de mantener este tesoro. El origen de esta torre se cree que podría corresponder a una iglesia desaparecida. Se habla de Santa Isabel, San Martín o incluso el Salvador.  Fuera como fuera, la torre es el elemento patrimonial más importante de Castilfalé ya que es el que más antigüedad presenta. Su fecha no se conoce con exactitud pero se calcula que corresponde a la Baja Edad Media y sufrió ya reformas en el siglo XVI.

La torre es de planta cuadrada, que va en disminución conforme gana altura hasta encontrarse con el curpo de campanas, lo que hace que los muros tengan forma de talud con claro cometido arquitectónico, pues a´si es más fácil contrarrestrar los empujes en la base. La singularidad de esta construcción hace que la parte superior tenga vanos germinados en todos los frentes, en el que se concentraron la mayoría de los esfuerzos ornamentales.

Se trata de una arquitectura de barro,, el interior es de tapial en el que se perciben las diferentes hendiduras para el acomodo de los forjados. El exterior fue forrado de ladrillo que el paso del tiempo provocó que buena parte se cayera pero la construcción resistió 

Las cifras

Gracias a la colaboración de diferentes administraciones ese proyecto ha visto la luz. En total se han invertido 250.539 euros para conservar el emblema de Castilfalé. Del Valle reconoce que el Ayuntamiento no logró la subvención específica para la recuperación de patrimonio por lo que dedicaron los Planes Provinciales de la Diputación de León para el arreglo. El del 2020 51.400 euros y en el 2021 98.513 euros. El resto ha sido aportado por la Junta de  CAstilla y León que ha aportado 72.940 euros además, el Somacyl, dependiente de la Junta de Castilla y León, destinó 36.684 euros para la realización de toda la estructura de madera del interior (escalera y mirador).