Un belén que es toda una terapia llena de optimismo

Sentir la Navidad y vivir la ilusión de estas fechas. Son las premisas de esta vecina de Valderas que es todo un ejemplo de optimismo. Diagnosticada con cáncer y en tratamiento de quimioterapia, Sonia Martínez, no ha perdido las ganas de disfrutar de la que es sin duda una de sus épocas del año favoritos. La Navidad y "montar el Belén". Lo lleva haciendo desde hace 23 años con ilusión, hace ocho años empezó a abrir las puertas de su casa en Valderas para que todo aquel que quisiera lo visitara, este año se animó a pedir un espacio público para que así todos pudieran conocer su Belén.

Y así, durante un mes, desde el día 8 -según explica el típico día para "montar el Belén- y hasta el próximo 8 de enero el edificio del antiguo Seminario de Valderas acoge este Belén artesanal. No hay entrada para visitarlo pero sí recibe donativos que entregará de forma íntegra a la Asociación Española Contra el Cáncer de León. "Para mí es toda una terapia y además colaboro con una buena causa" comenta Sonia quien insiste en que "la Navidad no es lo mismo sin Belén" por lo que anima a todos a disfrutar de la ilusión navideña. Sonia explica que "montar el Belén" le ha ayudado a mantener el ánimo y a encontrar una "salida" para superar los bajones de la enfermedad.

Un conjunto expositivo compuesto por centenares de figuras y casi medio centenar de edificaciones y construcciones  -la mayoría realizadas por ella misma de forma artesanal- .Como curiosidad cabe señalar que hay más de 25 especies de animales representadas.

La afición por los Belenes de Sonia viene de lejos. Lleva 23 años haciendo cada año más grande su conjunto. Empezó comprando un pequeño misterio y los reyes en un mercadillo navideño en Mallorca y, poco a poco, ha ido ampliándolo. Pronto optó por crear sus propias edificaciones y construcciones, "para que fueran más acordes" comenta, a las que no les falta detalle. Cada año suele tener algo nuevo y, en esta ocasión, es la cestería -con cestos hechos a ganchillo-.

El Belén ocupa aproximadamente 20 metros cuadrados y  tiene un orden, así lo explica su autora: "He recreado el Belén... el Nacimiento... como yo lo entiendo según narra la Biblia. Primero es el bosque... llega Belén y a la entrada una posada y muy cerca un portal...". Al conjunto no le falta detalle pero tampoco al montaje y es que Sonia hasta ha marcado con flechas en el suelo para seguir la visita en el Belén.

Oficios no faltan en el conjunto. Carnicero, panadero, agricultor, constructor... hasta un hospital, un puesto de chuches o una floristeria. Sonia comenta que le encanta recibir opiniones -de hecho tiene un buzón de sugerencias- y comenta que entre sus intenciones está la de crear una escena que recree una zona de oración musulmana, "me lo sugirieron y estoy pensando en hacerlo" afirma. Y entre tantas escenas tiene su favorita que es la de la zapatería, "ésta no la guardo y la conservo en una vitrina durante todo el año" asegura mientras señala todos los detalles de la recreación. Otra escena que también recuerda, pero por lo que le costó hacerla, es la del trillo. "Cuánto pensé para montar el trillo... fue complicado hasta que decidií utilizar puntas para el trillo" bromea.

Puntas, tuberías, palos, setas, garbanzos, un borrador roto... casi todo le vale a Sonia para sacar creatividad y aprovecharlo para su Belén. No en vano el conjunto está realizado con tableros y materiales reciclados. "A mi todo me vale" asegura emocionada mientras indica cómo ha hecho cada una de las escenas.

Unas escenas que también presentan un 'guiño' a Valderas. El conjunto tiene una zona de monte, regadío, secano y bodegas además de la ciudad propiamente. Precisamente en la zona de secano y majuelos es donde Sonia ha creado el 'rincón' dedicado a Valderas. Ahí están las tierras aradas, el trillo del secano, un palomar y, por supuesto, un majuelo. No hay ni iglesias ni edificios facilmente reconocibles porque según explica el Belén está ambientada en la época y "por aquel entonces no había iglesias".

Entre la multitud de figuras que pueblan el conjunto Sonia ha colocado a vecinos del pueblo. "Ahí está Julio en el campo  con las patatas y Ángela vendiéndolas en el mercado, Santos en el kiosko y José Ángel creando sus creaciones de moda junto con su madre Antonia. Por supuesto... no hay Belén que se precie que no tenga 'cagón' y éste a falta de uno tiene dos y un meón.

Y lo mejor... la ilusión. Sonia detalla con cariño cada rincón, narra la historia de cada figura y elemento y muestra con orgullo una creación que le ha dado fuerza y energía mientras atraviesa su enfermedad. "Al principio pensé que este año no pondría el Belén, pero... cuando iba llegando el momento de empezar con los preparativos pensé que la enfermedad no podía impedir que siguiera con la vida y con la ilusión. Así que por eso me propuse que este año tendría un doble objetivo... montar el Belén para que todo el mundo pudiera disfrutarlo y así vivir un poco más la ilusión de la Navidad y recaudar fondos para una entidad benéfica y  pensé en AECC debido a mi enfermedad".

Después de visitar el Belén, observar sus detalles y escuchar a Sonia... un@ siente la Navidad de verdad. Una visita más que recomendable, porque es mucho más que un Belén.... una auténtica terapia cargada de ilusión.

Puedes vistiarlo los martes, miércoles y jueves de 19:00 a 20:30 horas. Los lunes, sábados y domingos de 12:00 a 13:30 horas y de 19:00 a 20:30 horas.