Más de 200 bolilleras entretejieron arte en Valderas

La expresión "encaje de bolillos" hace referencia a algo muy complicado o prácticamente imposible. Una frase de nuestro vocabulario que tiene su origen en la dificultad de este arte que produce hermosos y delicados encajes. Una dificultad que se observa a simple vista al contemplar las decenas de bolillos (pequeñas herramientas de madera) que se utlizan para entretejer los encajes. Sin embargo, las encajeras -es un arte tradicionalmente ejecutado por mujeres- demuestran una agilidad que hacen parecer 'sencillo' lo difícil.

Más de 200 encajeras se dieron cita ayer en Valderas para participar en la tradicional Muestra de Encajeras de Bolillos, que este año ha alcanzado su décimosexta edición. Decenas de bolilleras llegadas de todo Castilla y León, Asturias, Cantabria y Galicia. Una ocasión única para admirar esta artesanía que, según algunas encajeras, relaja.

En esta afición no hay edad y aunque la mayoría de las encajeras son adultas, también hay jóvenes encajeras que demostraron su habilidad a la hora de manejar los bolillos.

Los visitantes pudieron, además de admirar la destreza de las artesanas, contemplar verdaderas obras de arte elaboradas por las encajeras: manteles, ligas, abanicos, pañuelos, peinetas e incluso pulseras.

Amuva, la Asociación de Mujeres de Valderas, es la organizadora de este evento que tiene un hueco privilegiado en el calendario de encuentros de encajeras. La cita contó además con un amplio mercadillo de artesanía y productos destinados para la realización de labores (manualidades, bordados y, por supuesto, bolillos), tampoco faltaron las pastas, dulces, embutidos y ajos de la tierra.

Manualidades y artesanías

Durante toda esta semana el edificio del antiguo Seminario ha acogido una exposición de manualidades y artesanías realizados por socias de Amuva en los talleres impartidos por Veri. Mantillas, cuadros, relojes y todo tipo de artículos decorativos realizados de forma artesanal compusieron esta hermosa muestra.