Danzas para la promesa de un pueblo

Un año más Pobladura de Pelayo García cumplió con su Voto, con su promesa a su patrona la Virgen de las Angustias. Los danzantes de la localidad, con sus tiesos trajes blancos, faldas almidonadas y cintas de colores, volvieron a honrar a la patrona con sus danzas y bailes. 

Esta tradición se pierde en el tiempo. La historia y la leyenda se entremezclan. Narran que allá por principios del siglo XIX una joven de la localidad enfermó gravemente y en un acto de devoción le pidió a la Virgen sanar. Y así sucedió. El pueblo, tras enterarse de la noticia, decidió sacar todos los años a la Virgen en procesión como agradecimiento y lo haría bailando. Y así se hace desde entonces en una de las tradiciones más arraigadas de la localidad. Una historia o una leyenda que marca el nacimiento común del Voto de la localidad y del grupo de baile de gran relevancia.

En una brillante y calurosa tarde de primavera la localidad volvió a arropar a su patrona con el sonido de las dulzainas y el paloteo de los danzantes. No faltaron los birrias organizando el cortejo.

La procesión finalizó con el canto de plegarias y alabanzas a la patrona. Como no podía ser de otra forma, este año, en los cantos se incluyó una estrofa pidiendo a la Virgen de las Angustias "agua para el campo". 

Después de la celebración de la procesión tuvo  lugar el VI Festival Folklorico de El Voto que en esta ocasión contó con dos grupos invitados que acompañaron al grupo local Virgen de las Angustias, el grupo Virgen de la Guía de Santa María del Páramo y S Tiago Silvade de Espinho (Portugal).