Izquierda Unida habla sobre el saneamiento animal

El Coordinador Provincial de IU, Santiago Ordóñez, denuncia mezcla de intereses públicos y privados con la concesión del saneamiento animal por parte de La Junta. IU apuesta por un saneamiento público, con medios suficientes y que dure todo el año y no solo 9 meses.

La Junta le ha dado la concesión de los Programas de prevención, control y erradicación de enfermedades de los animales para prevenir, controlar y erradicar enfermedades animales cuya presencia supone trabas al comercio o a la salud pública a EULEN-UTE, frente a otra oferta privada, Avescal. El contrato suma 3.363.037´35 euros.

El problema inicial que surge es el conflicto de intereses generado al dejar en manos de una empresa con ganadería propia, matadero y que actúa como integradora el saneamiento en toda la provincia y el resto de la comunidad autónoma. Esta decisión de la Junta se une al cierre del Hospital Clínico Veterinario como medida como poco controvertida en contra del campo leonés.

El segundo problema es el laboral. EULEN deberá contratar al personal que desarrollará las campañas y nada parece indicar que se apueste por gente con  experiencia, fijos discontinuos con tres años de trabajo por ejemplo. Se optará por contratos por obra y servicio para profesionales sin experiencia acumulada hasta ahora.

Para IU, y por mucho que la Consejería pregone que son trabajadores de las Unidades Veterinarias de la Junta quienes realizan las tareas de saneamiento, es evidente que EULEN no es un refuerzo; es la responsable del saneamiento ganadero.

Debemos considerar que la Sanidad Animal es la base de la Salud humana; un concepto que implica tanto a la Junta como a los propios ganaderos. Que debe tener en cuenta las zonas de convivencia entre animales domésticos y salvajes. Que debe ampliarse a todo el año, porque las bacterias no se van de vacaciones los tres meses donde no se realizan campañas.

IU apuesta por un modelo de saneamiento público e integral. La Sanidad Animal debe realizarse por trabajadores públicos, manteniendo abiertas las unidades veterinarias amenazadas de cierre por la propia Junta, en condiciones laborales decentes, sean fijos o fijos discontinuos, e implicar y coordinarse con los productores. Pero en ningún caso servir para generar un negocio privado a empresas que deberían ser incompatibles con esta actividad. La Junta debe concentrarse en mejorar la gestión del saneamiento no poner el dinero público en manos de sus amigos.