El Cristo vuelve a llenar Castrillo

Lo pequeño de los pueblos no impide la grandiosidad de sus fiestas y Castilfalé es un buen ejemplo de este hecho. Un municipio que no llega al centenar de habitantes pero que durante sus fiestas multiplica su población. Muchos son los que regresan al pueblo para disfrutar del Cristo y también son muchos los que visitan la localidad en busca de las que son, sin duda, unas de las fiestas más animadas de la zona. Y es que, en Castilfalé (o Castrillo como se le conoce popularmente) El Cristo se vive intensamente.


Las noches del Cristo amenizadas por la fantástica orquesta San Francisco se alargaron hasta altas horas de la madrugada. Tampoco faltaron las actividades para los pequeños que pudieron disfrutar de hinchables gratuitos, espectáculos musicales, teatro para todos los públicos y los juegos tradicionales.


Por supuesto, el Cristo contó con la tradición más arraigada con las preceptivas celebraciones eucarísticas y la adoración de la reliquia de la Santa Cruz.


Ayer finalizaron los actos de la programación festiva organizada por el Ayuntamiento de Castilfalé con una gran chocolatada y un campeonato de juegos variados. Así El Cristo de Castrillo se despidió hasta el año que viene.